10 nov 2010

Confrontación

- ¿Me tienes miedo?
- Claro, estaría loco si no lo tuviera.
- Me alagas.
- Se te pasará.
- Lo que decían sobre ti era cierto, hasta ahora, en tus últimos momentos, no eras capaz de mostrar una pizca de respeto.
- No  respeto a las criaturas como tú.
- Y desafiante.
- Sí, es sin duda un carácter que me causa problemas. Aunque ambos sabemos que no estoy aquí por mi carácter.

Por un instante sus ojos se encontraron.
Unos, desde arriba, fuertes y seguros. Completamente blancos, sin iris ni pupila aparentes.
Los otros, desde abajo, débiles y vidriosos. Con un color que cambiaba entre el verde del bosque y el más hermoso azul de mar. Y cada poco derramaban una lágrima que se entremezclaba con la sangre que recorría su rostro.
La mirada fue cuestión de segundos pero para mí fue como si el mundo se detuviese. Como si toda mi sangre dejara de fluir y mi corazón dejara de latir. Contemplar ante mí el mayor odio que el ser humano pueda imaginar, resumido en una simple mirada, marcaría para siempre mi devenir en el mundo.

- Si estás aquí es por no haberte querido doblegar.
- ¡Guau! Y me lo sueltas así. ¿Y todas vuestras consignas, mentiras y buenas palabras?
- No las malgastamos con engendros como tú.
- Dios, ahora soy yo quien se siente alagado.
- Se te pasará. Ah, y, no vuelvas a mentar su nombre.
- Cierto, es sagraaado.
- Já. Crees saber mucho sobre nosotros, ¿verdad? ¿Crees conocernos? No tienes ni idea. ¿Acaso sabes cuánto hemos trabajado?
- ¡Sé que habéis convertido la fe en un medio de opresión! ¡El gobierno y poder en corrupción! ¡Y el mundo en vuestro patio de recreos!
-  Bravo. Que palabras tan elocuentes. Quieres libertad y sin embargo nos subestimas. ¿De verdad crees que ese libre albedrío, toda esa discrepancia, no está controlada? Nos alimentamos de los sueños y las esperanzas de la gente. Son un verdadero manjar. Así que aflojamos las cadenas adecuadas en ciertas ocasiones. Siempre de un modo controlado claro está. Cada poco surge algún sujeto como tú, al que hay que subsanar. Pero por lo demás, suscitar polémica es terriblemente beneficioso. Que deseáis libertad, nada mejor que mencionar la ilegalización de las descargas, agredir a una pareja de homosexuales o darle a un párroco los deseos más pecaminosos sobre un niño de seis años. Política. Religión. Aborto. Eutanasia. Internet. Violación. Joder, hasta matando un toro o censurando una película conseguimos que unos cientos o incluso miles entren en cólera. ¿¡Se puede saber por qué diablos sonríes!?
- Es que me estaba acordando de algo muy gracioso que dijiste antes. Lo de que estaba en mis últimos momentos.
- Sí, ¿y?
- Bueno, en lo referente a eso te equivocas. Y también en otra cosa.
- ¿En serio? Ardo en deseos de saber en qué.
- En que esto es Demon Productions. ¡AQUÍ NO EXISTE LA CENSURA!

Las cadenas se rompieron en mil pedazos. Una enorme sombra se abalanzó sobre el ángel descuartizándolo de la más sangrienta forma posible y asegurándose de que se arrepintiera de todas y cada una de las palabras que había dicho. Era la primera vez que oía gritar a un ángel, era algo realmente espantoso. La brutal matanza acabo tan rápido como había empezado, entonces toda la estancia se  inundo de una luz cegadora y en medio de ella se podía distinguir una alta figura masculina. Era un humano, apenas tendría un par de años más que yo. Sus impresionantes ojos, representación de la naturaleza en toda su gloria, estaban clavados en mí; yo seguía inmóvil en el suelo. Entonces, ofreciéndome su mano, dijo:
- ¿Quieres ser libre para siempre?
Joder, creo que estoy enamorada.

2 comentarios:

  1. Sin censuras.
    Maravillosa forma de expresar lo que sientes.
    No se corten, por favor.
    (No estoy muy segura de quien escribe los textos, así que me limitaré a comentarlos en general, pero me alegro de que Roi haya cumplido su palabra)

    ResponderEliminar
  2. Ego (Roi) escribo los textos. Muchas gracias por el comentario mala malísima de la peli.

    ResponderEliminar